SANTO
DOMINGO.-El vicepresidente ejecutivo de la
Fundación Institucionalidad y Justicia
(Finjus), Servio Tulio Castaños Guzmán,
exhortó al presidente Danilo Medina "botar" a
los funcionarios que no han cumplido con la
Ley 82 sobre Declaración Jurada de Bienes,
porque el incumplimiento constituye un desafío
a su autoridad.
Castaños Guzmán afirmó que
hay que poner en práctica el sistema
de consecuencias porque es cuestionable que
funcionarios que ni siquiera son de alta
jerarquía desafíen al mandatario.
"Ahora, el presidente Medina lo que
tiene es que botar, separar de la Administración
(pública) a quienes han comenzado
no siendo digno de ella, porque tú tienes
que poner a funcionar los sistemas de consecuencias",
precisó.
Entrevistado por el periodista Federico
Méndez, en el programa Esferas de
Poder, que se transmite los domingos de 5:00
a 6:00 de la tarde, por Santo Domingo TV,
Castaños Guzmán no comprende
por qué le es tan difícil a
una persona hacer su declaración patrimonial,
que se supone si llega a la administración
pública es una persona que desde la
sociedad venía cumpliendo con su deberes.
"Más que un deber, es una obligación,
porque es un mandato que impone la Ley de
Declaración Jurada, esa es la realidad",
apuntó.
El jurista manifestó que uno de los
deberes que tienen los ciudadanos es pagar
sus impuestos. "Parecería, no
digo que es así, que quienes se resisten
a hacer la declaración probablemente
sea porque nunca declararon impuestos",
apuntó.
Considera que una de las cosas que debe
observar el Gobierno es ver si sus funcionarios
venían pagando sus impuestos, por
lo que valdría la pena que la Dirección
General de Impuestos Internos solicite las
declaraciones juradas que se están
depositando en la Tesorería Nacional
y vea si real y efectivamente estas personas
han cumplido con sus responsabilidades frente
al fisco.
Indicó que en cualquier país
del mundo, incluyendo Haití, el funcionario
que haga su declaración es susceptible,
incluso, de ser traducido a la acción
de la Justicia.
País fracasó en la implementación
del Código al Menor
El vicepresidente ejecutivo de la Finjus
consideró que el Estado fracasó con
la implementación del Código
del Menor, porque esa normativa establece
un sistema, como la prevención, que
nunca se ha cumplido.
"El Estado se dedicó única
y exclusivamente a implementar todo lo que
tiene que ver con la parte coercitiva, con
lo que es la persecución, con lo que
es la sanción y así no se puede",
declaró el jurista.
Advirtió que si la razón para
reformar la normativa era que aumentando
la pena se va a resolver el problema de la
criminalidad de los menores, la situación
no es así, porque se trata de un asunto
de salud pública, educación,
espacio y capacitación.
Entiende que si la reforma de la legislación
no se acompaña con una visión
integral con el asunto de las condenas, no
servirá para nada la modificación
de la ley 136-03. Dijo que actualmente hay
una población de 540 menores recluidos
por delitos, por lo que presagia que de aquí al
2014 habrá 2,000 presidiarios.
Castaños Guzmán recordó que
en la República Dominicana el 60%
de los embarazos son de adolescentes, de
menores sin padres, donde está el
problema.
"O sea, los criminales no se regeneran
porque se pasen 20 años en una cárcel,
los criminales o los imputados o quienes
resulten condenados se regeneran partiendo
de las políticas públicas que
los Estados diseñen para que situaciones
como esas no se repitan", explicó.
Castaños Guzmán sostuvo que
las penas no son ejemplos para la sociedad
y citó que hay países, como
los Estados Unidos, donde los Estados más
violentos son donde existe la pena de muerte
o la cadena perpetua como condena.
Comentó que parecería una
corriente mundial, en donde todos los países
comienzan a aumentar las penas "creyendo
ellos que con el aumento de las penas van
a resolver los problemas". |